El punto de partida imprescindible en
todo proceso de cambio, es y será siempre el reconocimiento de la
existencia de las causas que dificultan la evolución hacia los
objetivos deseados, tanto en las personas como en los proyectos.
Los difíciles condiciones que padecemos hoy
en la mayoría de los paises de Occidente, han sido sin
duda provocadas por haber querido llegar a todas partes de una manera rápida y
a través de atajos; es decir, son consecuencia de haber cambiado el
Valor y la Ejemplaridad por el Éxito y la Codicia; y ello ha llevado
a nuestras sociedades no solo al borde del abismo, sino además a la imposibilidad del retorno, dado que la engañosa situación
vivida en los últimos años, ha sido más producto de las fantasías
imaginadas, que de la pura y verdadera realidad.
Aterrizando ahora en nuestra realidad
nacional y después de haber escrito el P#23 “La gran farsa de la
razón”; hacer memoria de otro más antiguo, P#06 ¿Quién
gobierna al que nos gobierna?; y con la inestimable ayuda de nuestro
gran filósofo Ortega, cada día más admirado y más actual, cuando en su
prólogo para la versión en francés de su gran obra “La rebelión
de las masas” acuñó el termino “Hemiplejía Moral” (ver completo en
Wikipedia):
“ Ser de izquierdas es como ser de
derechas, una de las infinitas maneras que el hombre puede elegir
para ser imbécil; ambas en efecto, son formas de hemiplejía moral ...
Dándole vueltas a estas y otras fuentes como la siguiente cita de Platón:
"Nadie es voluntariamente malo: el malvado llega a serlo por algún habito vicioso del cuerpo o por una crianza estúpida, y estos son infortunios que le sobrevienen al hombre sin que el los escoja".
Y observando en repetidas ocasiones comportamientos para mi poco justificables, tanto por parte de nuestros políticos como por algunas Instituciones, y tratando de encontrar explicación a los mismos, como si de buscar un eslabón perdido del comportamiento humano se tratara, he llegado a reflexionar y a plantearme la duda siguiente: ¿Padecerán nuestros políticos e instituciones, 75 años después de los hechos, lo que podríamos dar en llamar el Síndrome de la Nietaputez Guerracivilista?
Nada más por ahora amigos gracias por leerme, os invito si lo deseáis a hacer comentarios al respecto, y os envío un cordial y afectuoso saludo.
DEDICATORIA: Quiero dedicar este humilde escrito a todas las Victimas del Terrorismo y muy especialmente a los asesinados y heridos en el atentado del HIPERCOR de Barcelona, así como a sus ejemplares familias, en su 25 Aniversario (18/6/1987). Los ciudadanos de bien, siempre os tendremos en la memoria.
Estimado Josevi, un placer saludarte y feliz de haber llegado hasta tu blog. Me gusta tu forma de pensar y como escribes, así que iré leyendo tus artículos poco a poco. Comparto contigo la idea de que el abismo que viven nuestras sociedades no es más que el resultado de la premura pasada, necesaria en su momento, pero inútil en la actualidad. Sobre tu pregunta: ¿Padecerán nuestros políticos e instituciones, 75 años después de los hechos, lo que podríamos dar en llamar el Síndrome de la Nietaputez Guerracivilista? Pienso que es probable, la historia se repite cada cuanto en la humanidad, y esta no podría ser la excepción. Pero más allá de esto me agradó mucho que citaras a Ortega, y su término “hemiplejía moral”, la cual me llevo como parte de nuevo conocimiento en mi haber. No así el admirado Platón con su frase “Nadie es voluntariamente malo” de la cual difiero en parte.
ResponderEliminarSeguiré con la lectura de tus buenos aportes del blog.
Un abrazo desde Caracas, Venezuela,
Rafael Baralt
(P.D.:El término “nietaputez” de tu autoría es simplemente genial)
Gracias Rafael, no imaginas como he celebrado tu valiente aportación y la fuerza que ella me ha transmitido. Como podrás comprobar es opinión pura y dura de alguien que a modo de Quijote, busca verdad y que no traga con los abusos ni las injusticias.
ResponderEliminarAl pan llamarlo pan y al vino vino, y si en nuestra grandiosa lengua castellana no existe el termino adecuado al pensamiento, no hay que recurrir a importarlo de otras lenguas, acaso podríamos encontrar sinónimo foráneo que mejor definiera la "Nietaputez" o el envenenamiento generacional.
Como bien conoces, no existen ¡¡Eurekas!! o han sido muy escasas en la vida de los hombres, se camina muy despacio y se hace camino al andar. Pero hay que ser conscientes de los pequeños avances, muchas veces al leerlos parecen obviedades que cualquiera piensa; yo hace años que decidí cambiar las partituras y empecé a leer los legados de los que nos precedieron y ahora al tiempo que escribo, me viene al hilo el bueno de Gandhi:
"Casi todo lo que realice será insignificante, pero es muy importante que lo haga"
Gracias de nuevo amigo, y te recuerdo las palabras de Jesucristo: "Nadie es profeta en su tierra". El fue consciente del hecho, al comprobar que sus predicas tuvieron en Cafarnaúm el eco que le había sido negado en Nazaret.
Un abrazo y conservate bueno